Imagen de archivo. Foto: UGRUn estudio internacional liderado por la Universidad de Granada (UGR) ha arrojado luz sobre la cantidad de pasos diarios necesarios para reducir notablemente el riesgo de sufrir una muerte prematura: 8,000 pasos, equivalente a aproximadamente 6.4 kilómetros al día. Además, los investigadores han demostrado que incluso pequeños incrementos en la cantidad de pasos pueden ofrecer beneficios medibles para la salud. En particular, en individuos con niveles bajos de actividad física, cada 500 pasos adicionales mejoran su bienestar.
En lo que respecta al riesgo específico de morir por enfermedad cardiovascular, la mayoría de los beneficios se observan al alcanzar aproximadamente los 7,000 pasos diarios. Este estudio no solo proporciona la cantidad óptima de pasos para obtener la mayoría de los beneficios en la mayoría de las personas, sino que también demuestra que el ritmo al que se dan los pasos tiene un impacto adicional; en otras palabras, es mejor caminar a un ritmo más rápido que lento.
Este innovador estudio fue realizado en colaboración entre investigadores de Holanda (Radboud University Medical Center), España (Universidades de Granada y de Castilla la Mancha) y Estados Unidos (Iowa State University). Hasta hace poco, la creencia popular era que caminar 10,000 pasos al día era la cantidad necesaria para obtener beneficios para la salud. Sin embargo, esta idea, originada en Japón en la década de 1960, carecía de una base científica sólida, según el autor principal del estudio, Francisco B. Ortega, catedrático del departamento de Educación Física y Deportiva de la UGR.
En resumen, caminar es una actividad física accesible y efectiva para mejorar la salud cardiovascular y reducir el riesgo de muerte prematura. No es necesario alcanzar los 10,000 pasos al día; 8,000 pasos diarios, con un ritmo constante, pueden marcar la diferencia en tu bienestar general.
Además de reducir el riesgo de muerte prematura, caminar tiene una serie de beneficios notables para la salud. Veamos algunos de los aspectos más destacados:
Mejora la salud cardiovascular: Caminar regularmente ayuda a fortalecer el corazón y mejorar la circulación sanguínea. Esto reduce la probabilidad de desarrollar enfermedades cardiovasculares, como hipertensión y enfermedad coronaria.
Control de peso: Caminar es una forma efectiva de quemar calorías y mantener un peso saludable. Puede ser especialmente útil para aquellos que desean perder peso o mantenerse en forma.
Mejora la salud mental: La actividad física, como caminar, libera endorfinas, que son conocidas como las "hormonas de la felicidad". Esto puede reducir el estrés, la ansiedad y mejorar el estado de ánimo en general.
Fortalece los huesos: Caminar regularmente puede ayudar a fortalecer los huesos y prevenir la pérdida de densidad ósea. Esto es importante para la prevención de enfermedades como la osteoporosis.
Aumenta la energía: A pesar de lo paradójico que pueda parecer, caminar regularmente puede aumentar tus niveles de energía. Te sentirás más alerta y menos fatigado en tu día a día.
Mejora la postura y la flexibilidad: Caminar con una postura adecuada puede ayudar a mejorar la alineación de la columna vertebral y la flexibilidad de las articulaciones.
Estimula la digestión: Caminar después de comer puede ayudar a estimular la digestión y reducir la sensación de hinchazón.
Fomenta la socialización: Caminar con amigos o un grupo puede ser una forma socialmente enriquecedora de hacer ejercicio. Puedes aprovechar para establecer conexiones sociales mientras mejoras tu salud.
Promueve el descanso: La actividad física regular, como caminar, puede mejorar la calidad del sueño. Esto significa que puedes disfrutar de un descanso nocturno más reparador.
Reduce el riesgo de diabetes: Caminar regularmente puede ayudar a controlar los niveles de azúcar en sangre y reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Es importante destacar que para obtener estos beneficios para la salud, es esencial mantener la constancia en tu rutina de caminata. Comienza con un objetivo alcanzable, como 8,000 pasos al día, y gradualmente puedes aumentar la intensidad y la duración de tus caminatas. Además, es recomendable combinar la actividad física con una alimentación equilibrada para maximizar los resultados.
Caminar es una actividad física simple pero poderosa que puede marcar una gran diferencia en tu salud y bienestar. El estudio liderado por la Universidad de Granada establece claramente que no necesitas llegar a los 10,000 pasos al día para obtener beneficios significativos. 8,000 pasos diarios, realizados a un ritmo constante, son suficientes para reducir el riesgo de muerte prematura y mejorar tu calidad de vida.
